(Mundo
Microfinanzas) El Fondo de Impulso Rural II (RIF II), administrado por Incofin,
proporcionó un préstamo de US$ 1 millón a la Fundación para el Desarrollo del
Sector Rural (Fundeser), en apoyo a su proceso de transformación de ONG a
compañía financiera regulada.
foto: Incofin |
Según
informó Incofin, junto con el financiamiento se está coordinando un proyecto de
asistencia técnica para preparar a la microfinanciera en su transformación
jurídica. La administradora de inversiones en microfinanzas belga dijo que este
apoyo financiero representa la confianza hacia Fundeser -unida a Incofin desde
2008- y al sector microfinanciero nicaragüense, pese a las recientes dificultades
del mercado en este país.
Incofin
señaló que desde 2011 la nueva Ley de Fomento y Regulación de las Microfinanzas,
que siguió al conflicto con los deudores del movimiento “No Pago”, ha
estimulado el acceso a servicios financieros de la población de menores
ingresos, ha dispuesto un marco de supervisión al sector y ha mejorado los
estándares de transparencia de precios. Bajo esta legislación, las tasas de
interés de microcréditos pueden ser pactadas libremente con el consumidor si
bien las IMFs se ven limitadas a imponer otro tipo de cargas sobre los
prestatarios además de tener que consultar el historial de crédito de todos los
clientes, dijo Incofin.
Creada en
2004, Fundeser asiste a 22 mil clientes en 18 sucursales. Sólo tres de estas
oficinas están en Managua, mientras que el resto de asienta en departamentos de
mucha presencia rural, en el norte y el sur del país, donde es más difícil el
acceso a servicios financieros.
Fundeser
ofrece una gama amplia de productos que incluyen préstamos para capital de
trabajo, para mejoras en el hogar, préstamos educativos y oportunidades de
negocio estacionales. Los préstamos, tanto individuales como en grupos
solidarios, están dirigidos sobre todo al sector agrícola (53%) y comercio
(36%). Una vez consumada la transformación en compañía financiera, Fundeser
también estará habilitada para captar depósitos de los clientes.
“Gracias a
sus buenas capacidades operacionales y al compromiso de su equipo de gestión,
Fundeser es una de las primeras IMFs en haber superado la crisis. Allí donde
los principales bancos comerciales nicaragüenses dudan en financiar a pequeños
y medianos productores -debido a los altos costos operativos implicados-
Fundeser tiene grandes oportunidades de responder a una demanda de crédito
rural grande e insatisfecha. Más de 300 mil productores ya cuentan con las IMFs
para el crédito de corto plazo con el que financian sus cosechas”, dijo la
firma belga.
Artículos
relacionados
Cooperativa de caficultores hondureños, primer beneficiario de fondo de comercio justo (22
de noviembre de 2012)
No hay comentarios:
Publicar un comentario