(Mundo
Microfinanzas) Las instituciones microfinancieras que se apoyan en la autogestión
y la participación de sus miembros (típicamente cooperativas) parecen tener una
fuerte ventaja competitiva para un alcance sostenible a las áreas rurales.
Esta es una
de las conclusiones de un nuevo estudio sobre microfinanzas y alcance rural
encarado por el grupo de acción Alcance e Innovación Rural (RoI, en inglés), de
la Plataforma Europea de Microfinanzas (e-MFP, con sede en Luxemburgo).
Las áreas
rurales aún carecen de acceso a servicios financieros. No obstante, el estudio encuentra
que las IMFs involucradas en financiamiento agrícola y rural por lo general hacen
participar a los clientes en sus operaciones o en sus procesos de toma de
decisión. La investigación analiza los principales aspectos estratégicos que
deben hacer frente las organizaciones basadas en sus miembros (Mbos, en inglés)
para expandir su alcance en el sector rural.
En la
medida que crecen, las Mbos tienen que decidir ante disyuntivas ligadas a
gobernanza y alianzas estratégicas. Si bien no hay soluciones mágicas para
estos dilemas, las formas como las Mbos lidian con ellos tienen un impacto crucial
en su desarrollo y en su capacidad para servir las áreas rurales, sostienen los
autores.
La
publicación analiza distintas decisiones estratégicas, y sus consecuencias,
tomadas en la práctica por Mbos financieras en América Latina y África. Se
estudian casos de las cooperativas Jardín Azuayo (Ecuador), Los Andes (Perú),
Cresol (Brasil), Crédit Rural de Guinée (Guinea) y Kafo Jiginew (Malí).
En el
pasaje medular del estudio, los analistas se enfocan en los
aspectos de gobernanza. Allí se plantea la disyuntiva sobre si las
organizaciones deben crecer profundizando su arraigo local (como parece ser el
caso de las latinoamericanas) o bien extendiendo su estructura a nivel nacional
(en África). Se analizan pros y contras en uno y otro caso. Dicho brevemente:
las latinoamericanas fortalecen su integración social, con menor apalancamiento
financiero, menor diversificación de riesgos, mejor posicionamiento como
posible socio local con otras organizaciones y más dificultades para ser
sostenible. Las africanas, en tanto, tienen más ventajas para una economía de
escala, mayores asimetrías y menor involucramiento de sus miembros, mayor
capacidad para atraer fondos externos, debilitamiento de su naturaleza democrática
y cooperativa.
Otro punto
que analiza la publicación es “¿hasta qué punto las Mbos en crecimiento
deberían redirigir responsabilidades de sus miembros hacia el staff?”. El dilema
conlleva el supuesto de la profesionalización de una institución que, en su
nacimiento, delegaba todas las responsabilidades en sus miembros. Ahora bien,
¿qué pasa cuando la institución crece? La cuestión plantea el complejo
equilibrio entre el control democrático y el gerenciamiento técnico.
Un tercer
punto vinculado a gobierno resulta también crucial: ¿deben las Mbos centralizar
el proceso de toma de decisiones a fin de mejorar el alcance rural? Aquí vuelve
a aparecer el contraste entre la experiencia latinoamericana y la africana. En
las cooperativas latinoamericanas prevalece una estructura relativamente
descentralizada, con organizaciones de base que mantienen una importante
autonomía (el ejemplo más claro es la brasileña Cresol, prácticamente una
organización paraguas de diversas cooperativas financieras locales y
microregionales). Las africanas, en cambio, tienden a estructurar sus redes con
el objetivo de centralizar aún más sus procesos de toma de decisión. Otra vez,
los pros y contras: las africanas reducen costos y agilizan la toma de
decisiones, pero con menor participación de los miembros y comités de crédito
menos eficientes. Las latinoamericanas, por su parte, incrementan costos, consumen
más tiempo, pero aseguran mayor compromiso de los miembros y un funcionamiento
más democrático.
Luego de
abordar estos dilemas de gobernanza, el trabajo analiza los tipos de alianzas
que establecieron las instituciones bajo estudio en pos de su crecimiento. Y se
detiene en tres tipos de alianzas de largo plazo especialmente importantes para
servir a las áreas rurales de un modo sostenible: alianzas con socios externos
internacionales y donantes, alianzas con pares y alianzas con organizaciones
locales y de productores.
Referencia
How do microfinance member based organizations successfully
serve rural areas? The
role of governance and strategic alliances (European Microfinance Platform,
preparado por A. Perilleux, A. Vanroose y F. Bédécarrat en colaboración con el
grupo de acción RoI de la e-MFP, Brief nº 3, Luxemburgo, octubre de 2012).
No hay comentarios:
Publicar un comentario