(Mundo Microfinanzas) Con una población estimada de
500 millones de pequeños agricultores en el mundo en desarrollo, la producción
agrícola cumple un rol muy importante en la reducción de la pobreza. El nuevo
documento del CGAP Segmentation of Smallholder Households distingue esta
amplia y diversa población en tres segmentos, determinados por elementos
comunes en la manera como se comprometen con los mercados y en el modo como
están organizados estos mercados.
Michael Tarazi |
“No todos los pequeños agricultores son lo mismo y este documento
representa un nuevo impulso detrás de la comprensión de las necesidades
financieras de distintos segmentos” de esta población, destacó Michael Tarazi, del CGAP. “Los
segmentos identificados en el documento no están pensados para ser divisiones
rígidas, sino más bien un punto de comienzo para el reconocimiento de metas y
necesidades financieras comunes y la provisión de productos financieros
adecuados”, agregó el especialista, de acuerdo con un comunicado de prensa
difundido por el CGAP.
Los hogares de los
pequeños establecimientos agrícolas tienen necesidades financieras complejas
que incluyen el logro de objetivos agrícolas específicos además de otros como
la estabilización del consumo y actividades no agrícolas. La densidad de
población relativamente baja en áreas rurales, el tamaño pequeño de la mayor
parte de las transacciones y la volatilidad natural de la agricultura han
dificultado la prestación de servicios financieros a estos pequeños agricultores.
“La
agricultura es, por naturaleza, estacional”, dijo Robert Peck Christen, coautor
del reporte junto con Jamie Anderson. “Los campesinos de una misma área quieren
financiarse generalmente en el mismo momento para emprender por lo general las
mismas actividades. Así se exponen a los mismos riesgos, lo cual es un desafío
para los proveedores de servicios financieros”, explicó Christen.
Proporcionar
servicios financieros para actividades agrícolas específicas ha demostrado
hasta el momento ser un reto, si bien el documento destaca algunas
oportunidades promisorias que pueden cubrir esta brecha entre la demanda de las
familias de pequeños agricultores y la oferta de los proveedores financieros, dijo
el CGAP.
En efecto,
los productos de ahorro comprometido, por ejemplo, son medios simples y muy
prácticos para limitar la accesibilidad de los fondos y dirigirlos hacia un uso
determinado. Los teléfonos móviles son un poderoso canal de prestación para
llegar a un gran número de clientes con un abanico de información a bajo costo.
Se necesita más información para mejorar nuestro conocimiento sobre aquello que
las familias agrícolas encuentran de útil en los productos, pero estos modelos
ya sugieren posibles ofertas pertinentes para cada uno de los tres segmentos
identificados por el estudio.
El acceso al financiamiento sigue siendo una condición necesaria, pero no suficiente, para
incrementar la producción agrícola y reducir la pobreza, según el documento del
CGAP. Para mejorar la oferta, la comprensión más fina de cómo difieren las
familias de agricultores y qué funciona en financiamiento agrícola es un primer
paso necesario.
Referencia
Segmentation of Smallholder Households: Meeting the
Range of Financial Needs in Agricultural Families (CGAP, por Robert Peck Christen
y Jamie Anderson, serie Focus Note, Nº 85, abril de 2013, Washington, DC).
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2013)
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