(Mundo Microfinanzas) Un programa de microcréditos rurales chino -conocido como el “modelo Wuyuan”- obtuvo el certificado internacional de calidad ISO 9001-2000.
El programa comenzó a implementarse en 2001 en Wuyuan, al este de la provincia de Jiangxi, con el apoyo del gobierno central y la administración de la Wuyuan County Rural Credit Union.
La iniciativa, enmarcada en la situación general del microcrédito en China, debió sobreponerse en un primer momento a una dificultad inherente al régimen político: la propiedad colectiva de las tierras, que restringió la posibilidad de desarrollar una industria y un mercado para el préstamo.
Para resolver el problema, el gobierno puso en marcha un modelo de “comités vecinales”, que asumieron la función de estimar la capacidad de cada vecino para afrontar un crédito: sus ingresos, los préstamos que haya obtenido en el pasado, sus historias de pago, como así también cuestiones más subjetivas como la reputación entre la gente del lugar.
A cada hogar se le asignó entonces un “grado de riesgo”, en función del cual la cooperativa local determinó los montos.
Estos microcréditos, sin garantía, oscilan en general entre los 10 y los 30 mil yuanes (U$S 1.400 a 4.200). El monto máximo puede alcanzar los 100 mil yuanes (14 mil dólares).
En su primer año de implementación, la Wuyuan County Rural Credit Union prestó 150 millones de yuanes a 23.519 familias rurales. La tasa de retorno fue de más del 95 por ciento.
El “modelo Wuyuan” no tardó en popularizarse a lo largo del país. El programa comenzó a ser aplicado por la mayoría de las cooperativas rurales, transformándose en una invalorable fuente de capitalización para la agricultura china.
Tras siete años, el modelo ha madurado y está mejor regulado. “Los microcréditos pusieron fin a una historia de dificultades y al mal clima para el crédito en las áreas rurales”, dijo Xiao Siru, presidente de la Jiangxi Provincial Rural Credit Union.
El experto en control de calidad Zhang Li sostuvo, por su parte, que el “ISO 9001-2000 es una certificación de reconocimiento internacional. Esto muestra que la regulación de China en microcréditos ha alcanzado un estándar internacional”.
La iniciativa, enmarcada en la situación general del microcrédito en China, debió sobreponerse en un primer momento a una dificultad inherente al régimen político: la propiedad colectiva de las tierras, que restringió la posibilidad de desarrollar una industria y un mercado para el préstamo.
Para resolver el problema, el gobierno puso en marcha un modelo de “comités vecinales”, que asumieron la función de estimar la capacidad de cada vecino para afrontar un crédito: sus ingresos, los préstamos que haya obtenido en el pasado, sus historias de pago, como así también cuestiones más subjetivas como la reputación entre la gente del lugar.
A cada hogar se le asignó entonces un “grado de riesgo”, en función del cual la cooperativa local determinó los montos.
Estos microcréditos, sin garantía, oscilan en general entre los 10 y los 30 mil yuanes (U$S 1.400 a 4.200). El monto máximo puede alcanzar los 100 mil yuanes (14 mil dólares).
En su primer año de implementación, la Wuyuan County Rural Credit Union prestó 150 millones de yuanes a 23.519 familias rurales. La tasa de retorno fue de más del 95 por ciento.
El “modelo Wuyuan” no tardó en popularizarse a lo largo del país. El programa comenzó a ser aplicado por la mayoría de las cooperativas rurales, transformándose en una invalorable fuente de capitalización para la agricultura china.
Tras siete años, el modelo ha madurado y está mejor regulado. “Los microcréditos pusieron fin a una historia de dificultades y al mal clima para el crédito en las áreas rurales”, dijo Xiao Siru, presidente de la Jiangxi Provincial Rural Credit Union.
El experto en control de calidad Zhang Li sostuvo, por su parte, que el “ISO 9001-2000 es una certificación de reconocimiento internacional. Esto muestra que la regulación de China en microcréditos ha alcanzado un estándar internacional”.
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