(Mundo
Microfinanzas) Quienes participaron de la primera sesión plenaria en la Cumbre
del Microcrédito de Valladolid, en noviembre del año pasado, recordarán las dudas
e interrogantes -y algún que otro murmullo desaprobatorio- que generó la nueva
iniciativa del Sello de Excelencia, presentada en esa ocasión por los
directivos de la Microcredit Summit Campaign.
Aquellas
dudas buscan ser disipadas, al menos en parte, luego de la carta conjunta
escrita por los responsables de las tres iniciativas globales surgidas en la
industria como respuesta a la necesidad de mejorar los resultados sociales de
las IMFs.
La carta, escrita en inglés y dirigida a sus colegas de la industria, lleva las firmas de Isabelle Barrès, de
la Smart Campaign; Laura Foose, de la Social Performance Task Force (SPTF) y Larry Reed, del Sello de Excelencia por Alcance a los Pobres y Poder Transformador. Fue dada a conocer en ocasión del meeting anual del SPTF,
realizado a comienzos de este mes en Jordania.
Escrita con
cuidada claridad, la carta se propone explicar de qué forma las tres
iniciativas trabajarán en conjunto y complementariamente, en busca de objetivos
comunes, pero sin solapamientos.
La carta
está dividida en segmentos y cada segmento tiene un título que condensa la
explicación. El primer segmento, luego de una breve introducción donde se
explicita el motivo de la carta, tiene el título Diferentes áreas de foco,
similares estrategias. Allí se explica: la Smart Campaign se enfoca en la
protección al cliente; la SPTF analiza el doble resultado final de la gestión:
social, además de financiero. Y el Sello de Excelencia se centra en el alcance
de la pobreza y los cambios que permiten al cliente salir de su condición de
pobre. Y pasa a explicar más en detalle cada una.
Titulado Una
progresión lógica: protección al cliente, gestión del desempeño social y
resultados a nivel del cliente, el segundo parágrafo dice que el punto de
partida es el cumplimiento de los Principios de Protección al Cliente de la
Smart Campaign. Estos principios deben interpelar el mandato de todos los
proveedores para un trato justo con los clientes, con transparencia y pautas
éticas que eviten el menor perjuicio. Y el cumplimiento de estándares adecuados
para cada Principio debe ser requerido en toda la
industria, apoyado por una regulación conveniente e implementado por proveedores
microfinancieros, asociaciones de la industria e inversores.
Luego sigue
con la SPTF. “Si bien no todos, muchos de los proveedores de microfinanzas
reivindican objetivos tanto sociales como financieros”, dicen los autores. Para
administrar este doble objetivo, la SPTF, junto a stakeholders, ha desarrollado
estándares de buenas prácticas que sirven como guía sobre cómo fortalecer la
gestión del desempeño social. Al definir y promover una sólida gestión en esta materia, los Estándares Universales para la Gestión del Desempeño
Social contribuyen a reenfocar a las IMFs sobre el cliente. Los Estándares demandan
de las IMFs metas claras de resultados para el cliente, responder a sus
necesidades y medir y hacer un seguimiento de los progresos.
Pero más
allá de seguir buenas prácticas, aquellos que van detrás de objetivos sociales
necesitan además ser responsables de los resultados. Y aquí viene el Sello de
Excelencia: “Necesitan ser capaces de mostrar si han cumplido con los
resultados buscados”, sostienen los firmantes. Una de las metas sociales trazadas
por muchos proveedores microfinancieros es llegar a los pobres y ayudarlos a
salir de la pobreza. El Sello busca, entonces, identificar a aquellas organizaciones
que puedan demostrar que están cumpliendo efectivamente con este objetivo.
Deslindadas
las funciones específicas, los autores se refieren a la arena común. Bajo
el título Acción coordinada para una causa común, dicen que mientras que cada
una de las iniciativas opera en forma independiente, se han dispuesto medidas a
fin de coordinar el trabajo. Los comités de dirección de las tres
organizaciones se mantendrán en conexión y dispondrán miembros en común en los
comités técnicos. Se ha avanzado también en la incorporación de una progresión
lógica entre cada iniciativa. Los Estándares Universales SPTF incorporan
indicadores desarrollados por la Smart Campaign. El Sello de Excelencia se construye tanto sobre los
Principios de Protección al Cliente como sobre los Estándares Universales SPTF.
Un último
párrafo (En producción: Un enfoque modular para ratings) adelanta progresos
de un trabajo en conjunto con calificadoras especializadas en microfinanzas. La
Smart Campaign lanzará en septiembre de 2012 su proceso de certificación
pública, en conjunto con las agencias de rating. El Sello de Excelencia está
actualmente en proceso de realizar un test beta de sus indicadores con raters
sociales. Las tres iniciativas trabajan en el desarrollo de un enfoque modular.
Barrès,
Foose y Reed invitan a los profesionales de las microfinanzas a ingresar a las páginas
de cada organización, interiorizarse sobre estas herramientas, sacarles
provecho para sus instituciones y establecer contacto ante cualquier duda o
sugerencia.
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