Stand de Pro Mujer en las Jornadas de Microfinanzas, Buenos Aires 2010 (foto: Mundo Microfinanzas) |
(Por Pro Mujer Argentina) Pro Mujer en Argentina, fundación dedicada a las microfinanzas, superó durante el mes de octubre las diez mil clientes atendidas por la fundación con financiamiento a sus pequeños emprendimientos.
Pro Mujer es una organización dedicada al desarrollo de la mujer y las microfinanzas que ofrece a mujeres de bajos recursos de América Latina un paquete integrado de servicios financieros, atención en salud y capacitación en desarrollo humano para librarse a sí mismas y sus familias de la pobreza. Presta estos servicios mediante asociaciones comunales, grupos de veinte a treinta clientas que se apoyan entre sí y garantizan mutuamente sus préstamos. Con pequeños préstamos, atención en salud y capacitación, las mujeres se convierten en agentes de cambio en sus familias y comunidades.
Fundada en 1990 por Lynne Patterson, docente de origen estadounidense, y Carmen Velasco, docente boliviana, Pro Mujer se propuso ayudar a la mujer latinoamericana a empoderarse y mejorar su calidad de vida y la de sus familias. La organización tiene presencia en Argentina, Bolivia, México, Nicaragua y Perú.
Pro Mujer considera que las mujeres son poderosos agentes de cambio capaces de romper el ciclo de la pobreza. Cuando las mujeres progresan y alcanzan el éxito, los beneficios en el hogar se ven de inmediato: la salud y alimentación de la familia mejora, y aumenta el ingreso y los ahorros en el hogar. Estos beneficios también se extienden a la comunidad y tienen un impacto positivo en las generaciones futuras.
En tal sentido, combate la pobreza y la discriminación brindando a las mujeres los recursos y las herramientas necesarias para aumentar su nivel de ingreso, mantener su salud y la de sus familias, alcanzar la equidad en sus hogares, lugar de trabajo y comunidades.
Pro Mujer en Argentina
Pro Mujer en Argentina empezó sus operaciones en noviembre del 2005 en la ciudad de Salta, provincia norteña con bolsones de pobreza cerca de la frontera con Bolivia, estableciendo inicialmente tres centros focales en aquellas zonas marginales previamente identificadas donde se encuentra instalada con mayor prevalencia la pobreza y las mujeres tienen dificultades de acceso a la salud y sufren de violencia. La aceptación de Pro Mujer fue muy grande. En los primeros tres meses se generó una cartera de créditos de 155 mil pesos (a valor de hoy, cerca de US$ 40 mil), beneficiando a 513 mujeres que pasaron a formar parte de la Fundación, con créditos promedio de 300 pesos (unos 75 dólares) por cada socia. En 2006 se expandió a la provincia norteña de Jujuy y en agosto de 2008 se abrieron las puertas en San Miguel de Tucumán. A octubre de 2010, cinco años del inicio de sus operaciones, con mucho orgullo y satisfacción, podemos decir que Pro Mujer ha superado las 10 mil clientes mujeres que son apoyadas por la fundación financiando sus pequeños emprendimientos.
Y este es el inicio, ya que continuaremos trabajando para seguir creciendo y alcanzar a más mujeres en situación de pobreza que necesitan nuestro apoyo en las distintas provincias argentinas.