(Mundo Microfinanzas) Organizar a campesinos en consorcios para poder brindarles recursos, herramientas y asistencia técnica a través del microleasing y microcrédito en la provincia de Zambezia, en el centro de Mozambique. El objetivo mayor: mejorar las condiciones de vida de una población masivamente rural, que vive en extrema precariedad, sin acceso a infraestructura básica y expuesta a la amenaza de la inseguridad alimentaria. Paradoja: Zambezia brinda abundantes tierras fértiles. Sólo hace falta apoyo para comenzar a trabajarlas.
Con este horizonte en mente se creó hace poco la Asociación para el Desarrollo de Mugeba (Assudemu). El nombre se debe a que dio sus primeros pasos en los distritos de Mugeba-Mocuba. Pero la asociación abarca toda la provincia, donde residen cuatro millones de habitantes (Censo INE 2008), de los cuales más del 80 por ciento vive en zona rural sin agua, sin luz y alejados de centros de salud y escuelas.
La coordinadora de los programas de Assudemu, Hélia Nsthandoca, se puso en contacto con Mundo Microfinanzas para dar a conocer la tarea que vienen realizando, cómo es el entorno socioeconómico en el que se desenvuelven y, sobre todo, transmitir cuáles son sus necesidades.
“En este proyecto esperamos suministrar a los pequeños productores formación en gestión de negocios rurales, artesanado, turismo, industria de procesamiento agroindustrial y construcción, brindándoles asistencia técnica, equipamientos y accesorios, así como semillas, fertilizantes, entre otros recursos”, relató Hélia.
“Siendo que la mayor parte de las personas vive en zonas rurales y de la agricultura de subsistencia, nuestro proyecto inicial -continuó la coordinadora- tiene como objetivo organizar a los campesinos en consorcios y brindarles recursos para que puedan incrementar su capacidad productiva, que actualmente es muy baja, fomentar la creación de activos propios para que logren el objetivo final que es el de mejorar sus condiciones de vida”. Para ello necesitan encontrar socios, financiadores, inversores interesados en hacer este proyecto realidad.
Explicó Hélia que la provincia de Zambezia tiene más de siete millones de hectáreas en tierra fértil, de las cuales sólo cerca de 2% está siendo aprovechada debido principalmente a la falta de instrumentos y know how. La cantidad media de tierra por campesino es de dos hectáreas y la productividad anual de no más de 1,5 toneladas. Eso contribuye a la inseguridad alimentaria. Y precisó: “Lo que ellos producen alcanza sólo para 2,5 meses al año. En los restantes 9,5 meses los campesinos o deben emigrar para las ciudades en busca de empleos ocasionales de todo el tipo o dedicarse a la caza y recolección de especies silvestres que, con el tiempo, resultan más y más difíciles de encontrar debido a la devastación de las florestas con fuegos”.
La asociación se propone con este proyecto incrementar las reservas alimentarias de 2,5 meses a los 12 meses al año.
Resaltó que la estructura de la asociación funcionará como una empresa social, es decir, con participaciones y lucros pero cuyos dividendos se reinvertirán en su totalidad, al menos en los primeros diez años.
Actualmente, Assudemu tiene auspiciantes y promotores locales: Caritas Diocesana de Quelimane (capital de la provincia de Zambezia) y autoridades locales de la provincia de Zambezia y del distrito de Mocuba. Dispone de un terreno de aproximadamente 20 hectáreas, fondos en dinero por cerca de 30 mil euros y mano de obra (alguna muy calificada pero la mayor parte no).
“Pero para implementar el programa en los próximos tres años todavía necesitaremos cerca de 500 mil euros, dijo Hélia, principalmente para la adquisición de los insumos y maquinaria que deben ser suministrados a los varios consorcios de campesinos. Nuestro objetivo dentro de cinco años es alcanzar al 1% de los campesinos, que serían 32 mil clientes”.
La asociación piensa, por ejemplo, en proveedores de maquinaria agrícola e insumos interesados en ingresar en el mercado mozambiqueño. “Podríamos hacer una parcería, en este caso no sería necesaria la contribución en dinero pero sí en bienes”, sugirió.
Y aclaró: “No significa que los proveedores regalen nada a la asociación: nosotros venderemos las maquinarias, implementos e insumos a los consorcios de campesinos a través del microleasing o microcréditos. Los proveedores serán también socios de la asociación, pudiendo de este modo tener acceso al mercado mozambiqueño, principalmente en las provincias de Zambezia y Nampula. Estas dos provincias solas acumulan el 43% de los productos agrícolas del país y son las más populosas: entre ambas reúnen a más de seis millones de habitantes.
Hélia Nsthandoca tiene Máster en Microfinanzas por la Universidad de Bergamo, Italia (2005) y es Licenciada en Economía por la Universidad de Camagüey, Cuba (2002).
Para mayor información y contacto con la asociación: assudemu@gmail.com
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| Hélia Nsthandoca |
La coordinadora de los programas de Assudemu, Hélia Nsthandoca, se puso en contacto con Mundo Microfinanzas para dar a conocer la tarea que vienen realizando, cómo es el entorno socioeconómico en el que se desenvuelven y, sobre todo, transmitir cuáles son sus necesidades.
“En este proyecto esperamos suministrar a los pequeños productores formación en gestión de negocios rurales, artesanado, turismo, industria de procesamiento agroindustrial y construcción, brindándoles asistencia técnica, equipamientos y accesorios, así como semillas, fertilizantes, entre otros recursos”, relató Hélia.
“Siendo que la mayor parte de las personas vive en zonas rurales y de la agricultura de subsistencia, nuestro proyecto inicial -continuó la coordinadora- tiene como objetivo organizar a los campesinos en consorcios y brindarles recursos para que puedan incrementar su capacidad productiva, que actualmente es muy baja, fomentar la creación de activos propios para que logren el objetivo final que es el de mejorar sus condiciones de vida”. Para ello necesitan encontrar socios, financiadores, inversores interesados en hacer este proyecto realidad.
Explicó Hélia que la provincia de Zambezia tiene más de siete millones de hectáreas en tierra fértil, de las cuales sólo cerca de 2% está siendo aprovechada debido principalmente a la falta de instrumentos y know how. La cantidad media de tierra por campesino es de dos hectáreas y la productividad anual de no más de 1,5 toneladas. Eso contribuye a la inseguridad alimentaria. Y precisó: “Lo que ellos producen alcanza sólo para 2,5 meses al año. En los restantes 9,5 meses los campesinos o deben emigrar para las ciudades en busca de empleos ocasionales de todo el tipo o dedicarse a la caza y recolección de especies silvestres que, con el tiempo, resultan más y más difíciles de encontrar debido a la devastación de las florestas con fuegos”.
La asociación se propone con este proyecto incrementar las reservas alimentarias de 2,5 meses a los 12 meses al año.
Resaltó que la estructura de la asociación funcionará como una empresa social, es decir, con participaciones y lucros pero cuyos dividendos se reinvertirán en su totalidad, al menos en los primeros diez años.
Actualmente, Assudemu tiene auspiciantes y promotores locales: Caritas Diocesana de Quelimane (capital de la provincia de Zambezia) y autoridades locales de la provincia de Zambezia y del distrito de Mocuba. Dispone de un terreno de aproximadamente 20 hectáreas, fondos en dinero por cerca de 30 mil euros y mano de obra (alguna muy calificada pero la mayor parte no).
“Pero para implementar el programa en los próximos tres años todavía necesitaremos cerca de 500 mil euros, dijo Hélia, principalmente para la adquisición de los insumos y maquinaria que deben ser suministrados a los varios consorcios de campesinos. Nuestro objetivo dentro de cinco años es alcanzar al 1% de los campesinos, que serían 32 mil clientes”.
La asociación piensa, por ejemplo, en proveedores de maquinaria agrícola e insumos interesados en ingresar en el mercado mozambiqueño. “Podríamos hacer una parcería, en este caso no sería necesaria la contribución en dinero pero sí en bienes”, sugirió.
Y aclaró: “No significa que los proveedores regalen nada a la asociación: nosotros venderemos las maquinarias, implementos e insumos a los consorcios de campesinos a través del microleasing o microcréditos. Los proveedores serán también socios de la asociación, pudiendo de este modo tener acceso al mercado mozambiqueño, principalmente en las provincias de Zambezia y Nampula. Estas dos provincias solas acumulan el 43% de los productos agrícolas del país y son las más populosas: entre ambas reúnen a más de seis millones de habitantes.
Hélia Nsthandoca tiene Máster en Microfinanzas por la Universidad de Bergamo, Italia (2005) y es Licenciada en Economía por la Universidad de Camagüey, Cuba (2002).
Para mayor información y contacto con la asociación: assudemu@gmail.com
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